Marca: Djeco
Referencia: dj09313
La gama Factory de Djeco es verdaderamente única e innovadora: combina sus apreciados kits de arte con una pizca de ciencia, introduciendo suavemente la física a los niños de la escuela primaria de una manera divertida, creativa e interactiva. Los kits fomentan la innovación y el aprendizaje basado en la investigación, y fomentan la curiosidad por descubrir el mundo que nos rodea. Este kit de robot incluye 2 tableros con imágenes que invitarán a los artesanos avanzados a cargar un par de robots creando circuitos completos desde cero; después, se agregan pegatinas y otros elementos decorativos para perfeccionar la obra maestra. ¡Aprenda a crear interruptores y circuitos completos comprendiendo las complejidades de la electricidad a través del juego y la experimentación, todo sin la presión de los estudios! Edad recomendada: + 8 Años.
ROBOTS FACTORY luminosos arte + tecnología DJECO kit de arte DJ09313 edad 8+
Kit de arte ROBOTS - FACTORY de la línea Arte + Tecnología, de Djeco.
El niño crea un circuito eléctrico incrustado en el accesorio utilizando el cable conductor.
Añade la batería, el LED... ¡y se enciende!
¡Una vez terminado, el accesorio se ilumina mágicamente!
Producido por la empresa francesa DJECO, especializada en juegos creativos y materiales educativos para niños.
Código: DJ09313.
Edad: 8+
En 1954, en pleno corazón de París, Véronique Michel-Dalès crea "Les jeux du Djeco" en alusión al gecko, un lagarto de pequeño tamaño del sudeste asiático portador de buena suerte. ¡Toda una pionera! En esta época, son muy pocas las mujeres y madres de familia emprendedoras.
Su audacia y creatividad la llevan a diseñar una serie de juegos educativos muy divertidos. La aventura comienza con una colección de dominós de colores para aprender las letras, los números, las sílabas y las sumas. Posteriormente, pasa a diseñar juegos más ilustrados como "Loto des 4 jeudis", "Bondo", "Télécolor" y "L’Auto-rallye" para niños y niñas.
Bonitos, inteligentes y llenos de fantasía, sus juegos se convierten en todo un éxito. En los años sesenta, su talento se ve recompensado con cuatro Oscars du Jouet (Óscar al mejor juguete francés).
Rápidamente, su hijo Frédéric se convierte en jefe de pruebas de todos sus inventos y crece con la mágica idea de que trabajar es jugar.